Introducción
El chile de árbol, conocido por su picor intenso y su característico color rojo brillante al madurar, es una variedad de chile (Capsicum annuum) originaria de México. Su historia se remonta a tiempos prehispánicos, donde diversas variedades de chiles eran cultivadas y utilizadas tanto en la gastronomía como en la medicina tradicional por culturas como los aztecas y mayas. Aunque no se tiene una fecha precisa de su domesticación específica, el chile de árbol comparte una larga historia con otros chiles mexicanos, siendo un componente fundamental de la identidad culinaria del país. Su nombre común hace referencia a su porte más erguido y leñoso en comparación con otras variedades de Capsicum.
Más allá de su sabor picante, el chile de árbol ofrece un interesante valor nutricional. Como otros chiles, es una fuente destacada de vitamina C, un poderoso antioxidante que apoya el sistema inmunológico. También contiene carotenoides, como el betacaroteno (precursor de la vitamina A), que son importantes para la salud de la visión y la piel. En menor medida, aporta algunas vitaminas del complejo B y minerales como el potasio.
Los beneficios para la salud asociados al consumo de chile de árbol, aunque deben considerarse con moderación debido a su picor, son notables. Su compuesto bioactivo principal, la capsaicina, es la responsable de su sensación picante y se ha estudiado por sus propiedades analgésicas, antiinflamatorias y antioxidantes. Además, la capsaicina puede tener un efecto termogénico, lo que podría contribuir a la quema de calorías. El consumo moderado de chiles también se ha relacionado con la mejora de la circulación sanguínea y la posible reducción del riesgo de ciertas enfermedades crónicas. Así, el cultivo del chile de árbol no solo enriquece nuestra gastronomía con su sabor distintivo, sino que también ofrece compuestos bioactivos con potenciales beneficios para la salud.
Indice de contenido
1. Taxonomía
2. Descripción de la planta
3. Propagación del chile de árbol
4. Consideraciones a tener en cuenta antes de sembrar con semilla del chile de árbol
5 Siembra en almácigo
6. Siembra directa en el suelo
7. Preparación del sustrato para el almacigo
8. Cuidados del semillero al sembrar chile de árbol
9. Trasplante de la plantilla del chile de árbol
10. Poda del chile de árbol
11. Poda del chile de árbol
12. Características automáticas
13. Tipo de suelo óptimo para el cultivo del chile de arbol
14.Clima
15. Ph
16. Abonado
17. Riego
18 Control de malas hierbas
19. Cosecha
20. Plagas y enfermedades
1. Taxonomía del cultivo del Chile de Árbol
Reino: Plantae (Vegetal)
División: Magnoliophyta (Angiospermas, plantas con flor)
Clase: Magnoliopsida (Dicotiledóneas)
Orden: Solanales
Familia: Solanaceae (Familia de las solanáceas, que incluye también tomates, papas y berenjenas)
Género: Capsicum
Especie: Capsicum annuum
Variedades/Tipos: Dentro de Capsicum annuum, el chile de árbol se considera un tipo específico con ciertas características distintivas en su morfología y picor. No suele haber sub variedades principales con nombres diferentes, pero pueden existir variaciones locales en tamaño y nivel de picor.
2. Descripción de la planta del Chile de Árbol
Hábito de Crecimiento: A diferencia de otros chiles annuum que suelen ser más arbustivos, el chile de árbol tiende a tener un porte más erecto y alargado, similar a un pequeño árbol o arbusto, de ahí su nombre. Puede alcanzar alturas de 1 a 3 metros.
Tallo: El tallo principal es leñoso en la base y se ramifica a medida que crece.
Hojas: Son lanceoladas (con forma de lanza), de color verde, y de tamaño mediano.
Flores: Son pequeñas, blancas o verdosas, con forma de estrella, típicas de las solanáceas. Son autógamas (se auto-polinizan), aunque la polinización cruzada por insectos puede ocurrir.
Frutos (chiles): Son bayas delgadas y alargadas, generalmente de 5 a 10 cm de longitud y aproximadamente 1 cm de diámetro. Inmaduros son de color verde y al madurar adquieren un color rojo brillante característico. Son conocidos por su picor intenso.
Raíces: Sistema radicular fibroso y bien desarrollado.
3. Propagación del Chile de Árbol
El chile de árbol se propaga principalmente por semilla.
4. Consideraciones a tener en cuenta antes de sembrar con semilla del Chile de Árbol
Germinación: Las semillas de chile de árbol generalmente germinan bien, pero la temperatura es un factor crucial. Requieren temperaturas cálidas para una germinación exitosa.
Ciclo de cultivo: El chile de árbol tiene un ciclo de cultivo relativamente largo, desde la siembra hasta la primera cosecha pueden pasar varios meses.
Sensibilidad al frío: Es una planta sensible a las heladas y a las bajas temperaturas. La siembra debe realizarse en la época adecuada para evitar daños por frío. En la región de Zapotlanejo, esto suele ser después de que haya pasado el riesgo de las últimas heladas de la primavera.
Espacio: Las plantas de chile de árbol necesitan espacio para crecer, tanto en altura como en extensión de sus ramas.
Calidad de la Semilla: Utilizar semillas de buena calidad, preferiblemente de fuentes confiables o de cosechas anteriores sanas.
Siembra con semilla del Chile de Árbol
La siembra de chile de árbol se puede realizar tanto en almácigos como directamente en el suelo, aunque la siembra en almácigos es más común para tener un mejor control de las condiciones iniciales.
5. Siembra en almácigo:
Utilizar bandejas de siembra, semilleros o macetas pequeñas con un sustrato adecuado (ver sección posterior). Sembrar las semillas a una profundidad de aproximadamente 0.5-1 cm.
Mantener el sustrato húmedo y a una temperatura cálida (20-30°C) para favorecer la germinación. Colocar el semillero en un lugar protegido y con buena iluminación indirecta.
Una vez que las plántulas tengan 2-3 pares de hojas verdaderas y el clima sea favorable, estarán listas para el trasplante.
6. Siembra Directa en el Suelo:
Preparar el suelo adecuadamente, asegurándose de que esté suelto y bien drenado. Sembrar las semillas en hileras o grupos, dejando el espacio recomendado entre ellas. Cubrir las semillas con una capa delgada de tierra y regar suavemente.
Mantener la humedad hasta la germinación.
Realizar aclareos para dejar las plantas con el espacio adecuado. La siembra directa se puede realizar cuando las temperaturas del suelo sean consistentemente cálidas, generalmente a finales de la primavera o principios del verano.
7. Preparación del sustrato para el almácigo para sembrar Chile de Árbol
El sustrato para el almácigo de chile de árbol debe ser:
Bien Drenado: Para evitar el encharcamiento y la pudrición de las semillas y plántulas jóvenes.
Ligero y aireado: Para facilitar el desarrollo de las raíces.
Retenedor de humedad: Para mantener la humedad necesaria para la germinación.
Ligeramente rico en materia orgánica: Para proporcionar nutrientes iniciales a las plántulas.
Una mezcla adecuada podría incluir:
Turba o fibra de coco (40%)
Perlita o vermiculita (30%)
Compost fino o humus de lombriz (30%)
8. Cuidados del Semillero al Sembrar Chile de Árbol
Humedad: Mantener el sustrato constantemente húmedo pero no empapado.
Temperatura: Proporcionar una temperatura cálida (idealmente entre 20-30°C) para una germinación rápida y uniforme.
Luz: Una vez que las plántulas emergen, necesitan luz brillante. Colocar el semillero en un lugar con buena iluminación indirecta o utilizar luces de crecimiento si es necesario.
Ventilación: Asegurar una buena circulación de aire para prevenir la aparición de hongos y enfermedades.
Riego: Regar suavemente desde abajo o con un pulverizador fino para no dañar las plántulas.
Endurecimiento: Antes de trasplantar, aclimatar gradualmente las plántulas a las condiciones exteriores durante una semana o diez días, exponiéndolas progresivamente a más luz solar directa y a las temperaturas del exterior.
9. Trasplante de la plántula del Chile de Árbol
El trasplante de las plántulas de chile de árbol al suelo se realiza cuando:
-Las plántulas tienen un tamaño adecuado (unos 10-15 cm de altura) y han desarrollado varios pares de hojas verdaderas.
-El riesgo de heladas ha pasado por completo y las temperaturas del suelo son consistentemente cálidas.
El proceso de trasplante debe realizarse con cuidado:
Preparación del Suelo: El suelo debe estar bien trabajado, suelto, rico en materia orgánica y con buen drenaje.
Excavación de Hoyos: Cava hoyos con el tamaño adecuado para el cepellón de la plántula, dejando el espaciamiento recomendado entre plantas (generalmente 60-90 cm entre plantas y 90-120 cm entre filas, dependiendo del espacio disponible y la variedad).
Extracción de la Plántula: Extrae la plántula del semillero con cuidado, tratando de no dañar las raíces.
Plantación: Coloca la plántula en el hoyo, asegurándote de que la corona (donde el tallo se une a las raíces) quede al nivel de la superficie del suelo.
Relleno y riego: Rellena el hoyo con tierra suavemente y riega bien para asentar el suelo alrededor de las raíces.
Protección inicial (opcional): En los primeros días después del trasplante, puedes proteger las plántulas del sol directo intenso con una malla de sombra si es necesario.
10. Preparación del sustrato y de la maceta para trasplantar la plántula del Chile de Árbol
Si se va a cultivar chile de árbol en macetas, se deben considerar los siguientes aspectos:
Sustrato: Utilizar una mezcla rica y bien drenada con abundante materia orgánica. Una mezcla de tierra de jardín, compost, perlita o fibra de coco en proporciones iguales puede funcionar bien.
Maceta: Elegir macetas grandes, de al menos 10-20 litros de capacidad por planta, para permitir un buen desarrollo de las raíces. Asegurarse de que la maceta tenga buenos orificios de drenaje.
El proceso de trasplante es similar al descrito para el suelo.
11. Poda del Chile de Árbol
La poda del chile de árbol generalmente no es necesaria para la producción de frutos, pero se pueden realizar algunas prácticas para mejorar la estructura de la planta, la circulación del aire y facilitar la cosecha:
Poda de Formación: En plantas jóvenes, se pueden eliminar algunas ramas bajas para fomentar un tallo principal más fuerte y un hábito de crecimiento más erguido.
Eliminación de ramas dañadas o enfermas: Retirar cualquier rama que esté seca, dañada o muestre signos de enfermedad.
Poda de Ventilación: En plantas muy densas, se pueden eliminar algunas ramas interiores para mejorar la circulación del aire y la penetración de la luz, lo que puede ayudar a prevenir enfermedades fúngicas.
Despunte (Opcional): En algunas ocasiones, se puede despuntar la parte superior de la planta para fomentar una mayor ramificación y una producción más abundante, aunque esto puede no ser necesario para el chile de árbol.
La poda debe realizarse con herramientas limpias y afiladas.
12. Características edafoclimáticas del Chile de Árbol
El chile de árbol requiere condiciones específicas para un crecimiento óptimo, las cuales suelen encontrarse en lugares templados.
13. Tipo de Suelo Óptimo para el Cultivo del Chile de Árbol
Bien Drenado: Es crucial para evitar el encharcamiento, que puede provocar la pudrición de las raíces.
Rico en Materia Orgánica: El chile de árbol se beneficia de un suelo fértil que proporcione los nutrientes necesarios para su crecimiento y producción de frutos picantes.
Textura Franco-Arenosa a Franco-Limosa: Estos tipos de suelo proporcionan un buen equilibrio entre drenaje y retención de humedad.
Profundidad Adecuada: Un suelo con una profundidad de al menos 30-45 cm es recomendable para un buen desarrollo radicular.
14. Clima Óptimo para el Cultivo del Chile de Árbol
Cálido: El chile de árbol es una planta de clima cálido y requiere temperaturas entre 20 y 30°C para un crecimiento óptimo. Las temperaturas nocturnas no deben descender por debajo de 15°C.
Soleado: Necesita pleno sol (al menos 6-8 horas al día) para una buena floración y fructificación. La abundante luz solar es ideal.
Humedad Moderada: Prefiere una humedad relativa moderada. La humedad excesiva puede favorecer la aparición de enfermedades fúngicas.
Protección contra Heladas: Es muy sensible a las heladas, por lo que el cultivo debe planificarse para evitar las bajas temperaturas invernales que ocasionalmente pueden ocurrir en la región.
15. pH que Requiere el Chile de Árbol
El chile de árbol se desarrolla mejor en suelos con un pH ligeramente ácido a neutro, en un rango de 6.0 a 7.0.
16. Abonado del Chile de Árbol
El chile de árbol se beneficia de una fertilización adecuada para un buen crecimiento y una producción abundante de chiles picantes:
Preparación del suelo: Incorporar abundante compost bien descompuesto o estiércol curado antes de la siembra o el trasplante.
Fertilización de fondo: Se puede aplicar un fertilizante orgánico equilibrado (rico en nitrógeno, fósforo y potasio) al momento del trasplante.
Fertilización de cobertura: Durante la temporada de crecimiento, se pueden realizar aportes de fertilizante orgánico líquido rico en nitrógeno al inicio para promover el crecimiento vegetativo, y luego cambiar a un fertilizante más rico en fósforo y potasio durante la floración y fructificación. Se pueden utilizar emulsiones de pescado, harina de hueso, ceniza de madera (con moderación por su alcalinidad) o compost líquido.
Micorrizas: La inoculación del suelo con hongos micorrícicos al momento del trasplante puede mejorar la absorción de nutrientes.
17. Riego del Chile de Árbol
El riego adecuado es crucial, especialmente durante las etapas de floración y fructificación:
Riego Regular: Mantener el suelo constantemente húmedo pero no encharcado.
Frecuencia: La frecuencia del riego dependerá del clima y del tipo de suelo. En la regiones cálidas puede ser necesario regar con más frecuencia, especialmente durante los meses secos.
Riego a la Base: Regar directamente a la base de la planta para evitar mojar las hojas y reducir el riesgo de enfermedades fúngicas.
Mulching (Acolchado): Aplicar una capa de acolchado orgánico ayuda a conservar la humedad del suelo, suprimir las malas hierbas y mantener una temperatura más uniforme.
18. Control de Malas Hierbas del Chile de Árbol
El control de malas hierbas es importante para evitar la competencia por agua, nutrientes y luz:
Acolchado (Mulching): Utilizar acolchado orgánico alrededor de las plantas.
Cultivo manual: Realizar escardas regulares para eliminar las malas hierbas jóvenes.
Solarización del suelo (antes de la siembra): Puede ayudar a reducir la población de semillas de malas hierbas.
19. Cosecha del Chile de Árbol
La cosecha del chile de árbol se realiza cuando los frutos han alcanzado su madurez y tienen el color rojo brillante característico. El momento de la cosecha también puede depender del uso que se le dará al chile (fresco, seco):
Madurez: Los chiles deben estar completamente rojos y firmes.
Método: Se pueden cortar los chiles individualmente del tallo con unas tijeras o un cuchillo afilado.
Frecuencia: La cosecha puede ser escalonada a medida que los chiles maduran en la planta.
Es importante tener precaución al manipular los chiles picantes y usar guantes si es necesario para evitar la irritación de la piel.
20. Plagas y enfermedades del chile de árbol
-El picudo del chile Anthonomus Eugenio Cano
El picudo del chile también conocido como barrenillo es una plaga cuya larva se alimenta de los botones florales provocando su desprendimiento.
-GUSANO DEL FRUTO, Helicoverpa (Heliothis) zea (Boddie) las larvas se alimentan de las semillas y la pulpa.
-PULGÓN VERDE DEL DURAZNO, Myzus persicae (Sulzer) y PULGON DEL
ALGODÓN, Aphis gosypii Glover. Transmiten virus.
