¿Te avergüenza el olor que sale de tu boca? Esto te podría estar pasando.
El mal olor de la boca o alitosis puede ser por varias razones:
Dientes mal lavados
Enfermedad del estómago, hígado o esófago
Toncilolitos
Los toncilolitos se producen en las amígdalas o anginas cavernosas.
Las amígdalas son el conjunto de ganglios linfánticos que están situadas en ambos lados al final de la boca o principio de la garganta. El sistema linfático nos protege de microorganismos víricos, bacterianos, fúngicos, etc. Por lo tanto, es el encargado de eliminar a cualquier patógeno que intente colarse en el cuerpo. Las amígdalas al ser parte del sistema linfático se encargan de eliminar infecciones o bacterias para prevenir infecciones en el cuerpo.
Pero las amígdalas no siempre producen toncilolitos por causas internas del cuerpo, a veces también emergen debido a un pequeño trozo de comida que cae en las cavernas al ingerir los alimentos. Cuando esto pasa las amígdalas reaccionan ante este cuerpo extraño cubriéndolo con una masa amarillenta producida por los glóbulos blancos.
Síntomas que indican que traes toncilolitos:
Mal aliento (halitosis) que persiste aún después de ir por una limpieza de dientes al doctor y sigas todas las indicaciones de tu dentista para tener unos dientes limpios y encías saludables.
Sensación de que algo está atorado en la garganta.
Dolor de garganta y oído.
Como extraer un toncilolito de la amígdala
Lávate bien las manos y párate frente al espejo del baño. Iluminante con una lámpara. A continuación abre la boca y saca la lengua de forma que se puedan ver las amígdalas claramente. Observa si se asoma el toncilolito, puedes hacer con tu garganta como si fueras a garraspear para forzar que el toncilolito se asome. Una vez que ubiques como está acomodado y dónde está la puerta, con un esopo limpio empuja el toncilolito hacia la salida de la caverna. Posiblemente te den arcadas, no te preocupes es muy normal y siempre pasa al principio, después de unas cuantas veces que hagas esto lograrás vencer el asco.
Remedio casero para disminuir la producción de toncilolitos y desinflamar las amígdalas
1/2 vaso de agua caliente, tan caliente como tu boca la aguante, tampoco se trata de quemarte.
1 cucharadita de sal
Modo de preparación
Vierte la sal en el agua, bate hasta disolver y listo.
Modo de aplicación
Todas las noches, antes de acostarte, haz gárgaras con esta preparación que duren un minuto. Escupe y repite una vez más. Notarás como tus amigdalas disminuyen de tamaño.
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